OPERATORIA
Es la rama de la Odontología que estudia el conjunto de procedimientos que tienen por objeto devolver al diente su equilibrio biológico cuando por distintas causas se ha alterado su integridad estructural, funcional o estética. En esta rama, se usan diferentes técnicas y materiales, tales como:
 
 
RESINAS
Las resinas de foto curado se utilizan para la restauración de dientes tanto anteriores como posteriores.

Su principal diferencia con las amalgamas (metálicas) es su estética y biocompatibilidad.

Las resinas han evolucionado mucho desde que hicieron su primera aparición en la odontología restauradora. Hoy vienen en varios colores y opacidades, lo que le permite al odontólogo crear restauraciones casi imperceptibles, esto las hace muy solicitadas por los pacientes.
 
 
ORTOPEDIA

Solución temprana a los problemas de la boca

La ortopedia es el "arte de corregir o evitar deformidades en el cuerpo humano", especialmente en los niños, mediante el uso de ciertos aparatos especiales o ejercicios corporales que estimulan o re-dirigen el crecimiento óseo.

En el ámbito dental, se puede modificar el crecimiento de los huesos de la cara, incluyendo ambos maxilares, mediante aparatos ortopédicos que inciten o repriman el desarrollo óseo. Es la Ortopedia Dentofacial la responsable de corregir algunas maloclusiones que pudieran presentarse durante el crecimiento del niño.

 
Los tratamientos ortopédicos buscan modificar el patrón de crecimiento de los huesos. Si el niño tiene falta de crecimiento en alguna parte, la ortopedia buscará estimular el desarrollo de esa área. Por el contrario, si hay crecimiento excesivo de alguna región, se tratará de re-dirigir ese crecimiento de una forma más favorable para el paciente.

Todo esto llevará a una buena posición de los dientes dentro de las arcadas, a una oclusión adecuada, estable y funcional, acompañada, por supuesto, de una cara de proporciones adecuadas y un perfil armonioso.

Es conveniente llevar al niño a su primera cita dental cuando tenga cerca del año y medio de edad. Luego, al momento en que el pequeño tenga su dentadura decidua o temporal completa, alrededor de los 3 años, ya puede presentar ciertas características que indiquen si necesitará algún tipo de tratamiento ortopédico o simplemente de controles periódicos para monitorear su crecimiento y desarrollo.

Los tratamientos de ortopedia sólo son efectivos mientras el niño esté creciendo y deberán ejecutarse durante la etapa de crecimiento activo; antes del desarrollo puberal.

Mientras más temprano se inicie el tratamiento, mayores probabilidades de éxito habrá. Son tratamientos generalmente indoloros, por lo que casi siempre son bien aceptados por el niño.

Con el uso de aparatos ortopédicos se pueden corregir problemas transversales y verticales; es decir, falta de espacio para piezas permanentes; mordidas cruzadas anteriores y posteriores; falta de crecimiento del maxilar superior; deficiencias mandibulares y algunos tipos de hábitos.

A medida que el niño crece y se desarrolla, la anomalía se hace más evidente y difícil de corregir. Un tratamiento tardío puede llevar a tratamientos ortodónticos extensos con resultados pobres y poco satisfactorios, que buscarán "disfrazar" el problema, o en última instancia a una cirugía maxilofacial que corrija la deformidad.